¡Feliz Año 2019 a todos! Seguro que has empezado este año con energía, con entusiasmo y lleno de motivación. Si no, date tu tiempo, porque desde ya te digo que ¡Este es tu año!

Pide un deseo

Hace unos días alguien me dijo que pidiera un deseo para este año. Ayer mismo, mientras andaba por la calle, en un trayecto de 15 min. tuve una serie de pensamientos, unos encadenaban a otros, era como una serie que se repetía una y otra vez. 

Podría pensar en primera instancia que lo que quiero para este 2019 es tener dinero para un objetivo en común con F. Luego pensé, ya, pero quizás una vez que consiga el dinero, nos surja algo para lo que haya que invertirlo y que no estaba en nuestros planes. Luego pensé en que mi deseo sería tener ese bien material, un hogar propio y en propiedad. Pero pensé… Quizás la casa de nuestros sueños no esté en el 2019, todo es muy forzado. Así que paré un momento y me dije: Ya está Ana, ser feliz. 

Lo que me pasó fue un choque de emociones. Pedir un solo deseo para un año, 365 días, ¡Uno solo! Debe ser un deseo de peso, algo que me llene todo este 2019 y no puede ser algo tangible. 

«Sé el cambio que quieres ver en el mundo»

Mahatma Gandhi

Lo que hoy quiero transmitiros, es que a veces pensamos en bienes materiales que no tenemos y ansiamos y creemos que nos harán más felices. Y, querido lector, mi consejo es que lo material siempre sea un complemento pero nunca un esencial. A veces imaginamos que aquel bien material que has idealizado te dará toda la felicidad que te falta por tener, ese móvil tan magnifico que hará fotos increíbles, esa casa hará que vivas más tranquilo y confortable, ese abrigo tan caro hará que vayas tan calentito… 

Y a veces, ya sabéis que la vida es caprichosa, y nos da una palmadita en la espalda avisándonos de que las cosas no son siempre como imaginas. Que quizás ese teléfono te haga pasar menos tiempo con los tuyos, esa casa tan confortable, quizás no era la que estaba por llegar…. La reflexión de hoy es ser avariciosos en momentos, en experiencias, en descubrir sentimientos nuevos hacia los demás. Porque si eres feliz con lo que tienes, sea mucho o poco, todo lo demás serán añadidos que te complementarán pero no te llenarán por si solos. 

No os ha pasado que habéis pedido algo a los Reyes, esa cámara que tanto ansías, o ese reloj que es tan bonito y combina tan bien… Y cuando han pasado las horas, has pensado, ¿Y ahora qué? Ayer hablando con F de que regalo sería el que me dejaría con la boca abierta así de verdad, siempre llegaba a la conclusión de una experiencia, una vivencia que quedara en mi recuerdo para siempre. Un viaje, una comida, algo con lo que llenar mis recuerdos, siempre. 

Ahí quiero que volvamos una y otra vez. Ser terrenales y disfrutones con las experiencias que nos da la vida y las personas de nuestro alrededor. Que valoremos nuestra felicidad y aprendamos a vivir con muy poquito material y mucho de lo esencial, que son las emociones, sentimientos, experiencias. Que si aprendes a vivir así, y ser feliz con lo no-material, lo demás vendrá por añadidura y te hará complementar esa felicidad tan sana y bonita, que hoy te propongo experimentar. 

Ama, ámate y siempre ama. Desde el amor, todo se puede.

Que tengas una bonita semana. Muchas gracias por leerme y de todo corazón deseo que disfrutes con cada lectura. Con esto declaro oficialmente inaugurado…. 

¡El fin de semana y la noche de Reyes! 

 

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