¿Eres de los que piensa que estás donde estás por el trabajo diario? ¿Qué eres lo que eres por las situaciones que has vivido? ¿Quizás pienses que la vida te trajo aquí un día concreto, a una hora concreta, para hacer algo concreto? ¿Tienes las habilidades que tienes porque las has trabajado y potenciado?
¿Eres de los que tiene siempre consejos para los demás pero cuando tiene que enfrentarse a su propia situación no sabe por donde empezar?
Os he hablado de la empatía hacia los demás pero esta semana me he dado cuenta de lo importante que es la EMPATÍA hacia uno mismo. Conocerse, entenderse y ponernos en nuestra propia situación.
Lo que viene siendo QUERERNOS.
Suena tan redundante y confuso como importante y necesario.
Ese día que te levantas con un resfriado del quince, con la cabeza aturdida, el ánimo por los suelos y tu agenda sin un espacio en blanco de cosas que hacer y mil novedades que prometiste sacar. Te sientas en tu mesa de trabajo teniendo que dar todo de ti sin poder dar más de lo que tu cuerpo ese día te permite.
Calma nena, escúchate y mímate. Si… El trabajo va a estar ahí al día siguiente. Una hora de bajar el ritmo o un desayuno calmado hará que el resto del día funciones al 100%.
Seguro que os ha pasado que en cierta situación vuestra mente os decía una cosa y vuestro corazón otra muy distinta. ¿Teníais empatía hacia vosotros mismos cuando decidisteis que hacer? No hablo de egoísmo propio, hablo de empatía. De entenderte, saber que es lo que tu corazoncito te susurra a gritos.
Tenemos que ser capaces de entender nuestras emociones y sentimientos. Descubrir por qué ese sentimiento surgió en ti en ese determinado momento. Y dar una explicación sana, que no una justificación, a tus acciones. Tener claro los motivos para poder defenderte ante ti y ante la sociedad, si fuera necesario.
Conocerte te ayudará en un futuro a tomar la decisión más acertada. Saber que es lo bueno y malo de tu persona, sin orgullos ni pretensiones. Simple y llanamente conocerse.
Y tú, ¿Crees que te conoces bien a ti mismo?
Ama, ámate y siempre ama. Desde el amor, todo se puede.
Que tengas una feliz semana. Muchas gracias por leerme y de todo corazón deseo que disfrutes con cada lectura. Con esto declaro oficialmente inaugurado….
¡El fin de semana!
